miércoles, 18 de abril de 2012


LA TECNOLOGIA


El collage elaborado muestra como la tecnologia en la Historia de la Humanidad ha ido evolucionado y ha cambiado el estilo de vida de las personas, como este, a travez del tiempo nos ha ido facilitando la vida, ya que el hombre siempre a necesitado de tecnologia para sobrevivir, y como esta, al pasar de los años, estas herramientas han ido evolucionando con el hombre.

miércoles, 21 de marzo de 2012

1.1.1 transformación de la naturaleza

Una de las pocas excepciones de caracterización de sociedades en que la componente ambiental aparece claramente explicitada y asumiendo un papel estratégico la encontramos en la discusión de las sociedades basadas en lo que Marx llamó «el modo de producción asiático». Es decir, en sociedades que se organizaron en función de las posibilidades de aprovechamiento de un medio ambiente natural específico, generalmente asentadas en cuencas fluviales y estructuradas a base del aprovechamiento de los recursos hidráulicos. Siguiendo a Marx, con el desarrollo del modo de producción asiático se lleva a cabo el paso de la comunidad arcaica o primitiva a la sociedad de clases. Según Godelier, la comunidad primitiva corresponde a la economía de «ocupación de la naturaleza», y hay un proceso de transición hacia la economía de «transformación de la naturaleza».1 El modo de producción asiático establece una relación entre un Estado centralizado, el pueblo, y un determinado ambiente natural, conservando elementos propios de las sociedades primitivas, tales como una economía de autosuficiencia --asentada sobre la estructura de las aldeas-- y la ausencia de propiedad privada. Las condiciones para que se dé tal modo de producción se presentan cuando la utilización del medio impone la cooperación entre diferentes comunidades a fin de llevar a cabo obras públicas en gran escala, para beneficio de todos, y que sobrepasan las posibilidades y capacidades de las aldeas o de los grupos comunitarios considerados separadamente. Danilo Giori2 resume las características del modo de producción asiático en los siguientes cinco puntos fundamentales: ausencia de propiedad privada de la tierra; las comunidades primitivas mantienen una notable cohesión social; estrecha unión entre agricultura e industria artesanal; razones geoclimáticas hacen que la agricultura sólo pueda ser practicada mediante los sistemas de riego artificial. Existen, por lo tanto, las necesidades de grandes obras públicas de canalización, que a su vez requieren de una estructura social y un poder central que regule y lleve a cabo tales trabajos; El poder central adopta la forma de un Estado, con lo que da origen a una estructura de clases que centraliza la recolección del excedente, pero está desligada del proceso productivo. La caracterización anterior pone de relieve la importancia que la dimensión ambiental tiene tanto en la organización social del grupo como en su porvenir, al definir una estructura social que va creando nuevos elementos dinámicos en su seno (clases). Haciéndose eco de una inquietud de Marx, Engels escribía: ...la ausencia de propiedad de la tierra es ciertamente la clave para la comprensión de todo el Oriente. Aquí reside su historia política y religiosa. Pero ¿por qué los orientales no llegan a la propiedad territorial ni siquiera en su forma feudal? Creo que esto se debe principalmente al clima, junto con la naturaleza del suelo, especialmente en las grandes extensiones del desierto que parte del Sahara y cruza Arabia, Persia, India y Tartaria, llegando hasta la más elevada meseta asiática. El riego artificial es aquí la condición primera de la agricultura...3 Al margen del caso de las sociedades basadas en el modo de producción asiático, la consideración explícita de la dimensión ambiental es más evidente en las comunidades primitivas. éstas parecen lograr una relación más clara entre el sistema social y el natural, es decir, una mayor adecuación entre la dinámica de ambos sistemas. En África y en Amazonia se dan claros ejemplos de este equilibrio entre naturaleza y grupo social y de cómo ese equilibrio está relacionado por prácticas sociales, religiosas y de organización institucional o por ritos familiares. Los mboum del Camerún son una sociedad cuya principal actividad económica es el cultivo del mijo. Anualmente celebran una fiesta durante la cual se designan las áreas que serán quemadas y aquellas otras que serán sembradas. Es en la práctica una acción planificada del grupo basada en las necesidades alimenticias, el crecimiento de la población, las condiciones de la sabana, la situación climática, etc. Tal planificación, que algunos califican de ritual, se ejecuta rigurosamente; la rotación de los cultivos se sucede dentro del plazo requerido para permitir la regeneración de los suelos fértiles. En este contexto se entiende perfectamente cómo el régimen de propiedad debe someterse a las exigencias colectivas y no a las individuales. La propiedad privada está limitada estrictamente, permitiéndose sólo en la medida en que posibilita una relativa integración de la economía familiar (pequeños huertos de carácter artesanal). En el caso de los masai, pastores nómadas de Kenia, la organización social está basada en la clase guerrera, instrumento social necesario para conservar los territorios de pastoreo y preservar su integridad, amenazada por la expansión de los agricultores kikuyus de origen bantú. Al igual que en otros grupos nómadas, entre los masai el aumento de la cantidad de ganado no es entendido como acumulación de riqueza o signo de prestigio, sino como garantía de supervivencia en los periodos de sequía. Su estructura social y económica responde a una determinante ambiental a la que el sistema social se adapta y, en cierta medida, se somete. Tal vez uno de los casos más claros de adaptación al factor ambiental son las prácticas de control demográfico, que revisten distintas modalidades desde las guerras hasta los sacrificios, encontrándose ejemplos que abarcan las más diversas latitudes y periodos históricos, como, por ejemplo, los sacrificios humanos en la cultura azteca o las conocidas prácticas de infanticidio en las culturas china y japonesa. Es posible vislumbrar aquí una forma de control del sistema social para adaptarse, en términos cuantitativos, a la capacidad de sustento material del medio. Como puede apreciarse, las interrelaciones hombre/medio ambiente constituyen básicamente un proceso dinámico, mediante el cual se realiza la adaptación de un grupo social a un ambiente dado. Este proceso implica que ciertos hechos naturales sean incorporados, interiorizados e institucionalizados por el grupo social: en último término, «humanizados». El proceso de adaptación se efectúa por ajustes sucesivos de tal grupo social y de sus estructuras, y puede interpretarse como la respuesta del grupo a la dinámica del ambiente natural. En relación con éste la sociedad se organiza y busca los acomodos adecuados en el plano social, religioso, económico, institucional y político. La adaptación se realiza en sucesivas etapas definidas por nuevos conocimientos técnicos y culturales, cambios institucionales, etc. En última instancia, es un proceso dinámico de sucesivos ajustes entre el grupo y el medio ambiente natural. Lo anterior explica el fenómeno observado en muchos casos de identificación de elementos ambientales con elementos culturales y sociopolíticos. Por ejemplo, en África, la línea de los 350 mm de lluvia divide claramente las sociedades pastorales nómadas del desierto de las agrícolas dedicadas al cultivo de mijo en la región de Sahel. El breve ciclo vegetativo del mijo se adapta a las condiciones del clima de la región, a sus escasas lluvias, definiendo la organización social, económica e institucional de las sociedades sudano-sahelianas.4 En Etiopía la altura de los 1 500 metros sobre el nivel del mar separa a los agricultores abisinios monteístas de los nómadas islámicos, y en China la gran muralla corre a lo largo de la línea de precipitaciones de 380 mm, separando el mundo sedentario agrícola del nómada mongol.5 El caso de los massa de Camerún es similar: dos grupos del mismo origen se instalan a lo largo del río Logone. Unos ocupan las áreas secas y los otros las áreas inundadas, lo que determina actividades diferentes: la agricultura y la pesca. Esta especialización se deriva de las condiciones ambientales y se traduce en organizaciones institucionales y económicas distintas.6 En función de las aparentes coincidencias mencionadas, podría afirmarse que las modificaciones en los sistemas sociales se originan ya sea en causas internas, inherentes a la propia dinámica social, o en alteraciones que sufre el medio natural en cuestión. Las transformaciones del sistema natural pueden deberse a su vez a la acción que sobre él ejerce el grupo social o a procesos propios de la dinámica de los fenómenos naturales, sean éstos o no de tipo evolutivo. Las transformaciones naturales pueden tener periodos de gestación muy largos --decenas de miles de años-- superando las dimensiones temporales humanas, o producirse súbitamente, como en el caso de muchas catástrofes naturales. Los cambios pueden deberse a causas externas, en el sentido de que provienen o son originados en otros sistemas con los cuales el sistema social entra en contacto. Como el sistema social y el sistema natural están vinculados estrechamente, cabe asimismo tener por causal de cambios fenómenos originados en el proceso mismo de mutua interacción, que tiende en algunos casos a atenuar los cambios en uno de los sistemas y en otros a reforzarse mutuamente. Ambos sistemas --el natural y el social-- están en un permanente proceso de cambio, en una relación dinámica, como cabe apreciar, por ejemplo, en las sociedades de pastores que habitan en el Sahara: el avance sistemático por el desierto hacia el sur de las sociedades nómadas, que buscan condiciones climáticas aptas para su supervivencia. Este caso, entre otros muchos, ilustra cómo una concatenación de fenómenos naturales y procesos de cambio en el sistema social se refuerzan constantemente. Comunidades y paisaje, economía y recursos naturales, política y bienes comunes: los vínculos entre humanidad y naturaleza admiten distintas conceptualizaciones. Antonio Elio Brailovsky, uno de los referentes de los estudios ambientales en la Argentina, se atreve en la madurez de su carrera a compilar la historia de esas relaciones en el área iberoamericana, en un arco de más de diez siglos. El autor define lo ambiental como una noción híbrida: aquello que "cada grupo humano hace con su particular entorno natural y del modo como esas conductas revierten sobre las condiciones de vida de las personas". La "historia ecológica" analiza esas relaciones en el tiempo. La mirada de Brailovsky, profesor en las universidades de Buenos Aires y Belgrano, no es rígida ni apocalíptica: "No es cierto que los hombres destruyan siempre la naturaleza, como afirma cierto ecologismo simplista. Lo que hacen es transformarla". Argumenta que una condena a la humanidad en su conjunto tiene implicancias negativas en el plano ético y el pedagógico. El primer tomo de la obra, De los mayas al Quijote , inicia con el análisis de las ciudades medievales, con los mercados en el lugar central y la amenaza de la peste, hasta la llegada de las huestes de Cortés a México y el consecuente "choque de civilizaciones". Las fuentes son heterogéneas: la historia ecológica se ha colado en las mejores historias y Brailovsky reconstruye la primera espiando por las rendijas de la segunda. Otro hallazgo metodológico es la apelación a la literatura y el cine, con un efecto similar a la mayéutica de Sócrates: el lector cree recordar, más que aprender. Eso ocurre con la descripción de la ganadería trashumante en la España medieval. Brailovsky analiza los encuentros con pastores en El Quijote y postula que los paisajes del Cid fueron más verdes que los del sufrido Quijano. De este lado del Atlántico, el recorrido abarca el "urbanismo planificado" de Teotihuacán, la discusión sobre las causas de la crisis ecológica de las ciudades mayas y el cálculo, con algo de humor negro, del sentido ecológico que pudo haber tenido el canibalismo practicado en la gran Teotihuacán. El segundo tomo, De la independencia a la globalización , dedica un amplio espacio a la segunda conquista de América latina: la masiva llegada de capitales europeos y norteamericanos en torno del cambio del siglo XIX al XX. Con una mirada política y latinoamericanista, Brailovsky revisa las consecuencias ambientales de la posición periférica de la región y su papel subordinado a los planes e intereses de las potencias neocoloniales. La sangrienta explotación del caucho en la selva peruana y colombiana; las andanzas bananeras de la United Fruit en América Central; la historia de La Forestal y su impiadoso avance sobre los bosques del noreste de la Argentina son casos reveladores en su argumentación. En las décadas siguientes cambiarían las políticas, pero no el ataque a la naturaleza.

1.2 relacion existente entre la cultura, ciencia y tecnologia

definición de cultura

Cultura es un término que tiene muchos significados interrelacionados. Por ejemplo, en 1952, Alfred Kroeber y Clyde Kluckhohn compilaron una lista de 164 definiciones de "cultura" en Cultura: Una reseña crítica de conceptos y definiciones.2 Sin embargo, la palabra "cultura" es más comúnmente asociada en dos sentidos básicos: Excelencia en el gusto por las bellas artes y las humanidades, también conocida como alta cultura. Los conjuntos de saberes, creencias y pautas de conducta de un grupo social, incluyendo los medios materiales (tecnologías) que usan sus miembros para comunicarse entre sí y resolver sus necesidades de todo tipo. Cuando el concepto surgió en Europa, entre los siglo XVIII y XIX, se refería a un proceso de cultivación o mejora, como en la agricultura u horticultura. En el siglo XIX, pasó primero a referirse al mejoramiento o refinamiento de lo individual, especialmente a través de la educación, y luego al logro de las aspiraciones o ideales nacionales. A mediados del siglo XIX, algunos científicos utilizaron el término "cultura" para referirse a la capacidad humana universal. Para el antipositivista y sociólogo alemán Georg Simmel, la cultura se refería a "la cultivucación de los individuos a través de la injerencia de formas externas que han sido objetificadas en el transcurso de la historia".3 En el siglo XX, la "cultura" surgió como un concepto central de la antropología, abarcando todos los fenómenos humanos que no son el total resultado de la genética. Específicamente, el término "cultura" en la antropología americana tiene dos significados: la evolucionada capacidad humana de clasificar y representar las experiencias con símbolos y actuar de forma imaginativa y creativa; y las distintas maneras en que la gente vive en diferentes partes del mundo, clasificando y representando sus experiencias y actuando creativamente. Luego de la Segunda Guerra Mundial, el término se volvió importante, aunque con diferentes significados, en otras disciplinas como estudios culturales, psicología organizacional, sociología de la cultura y estudios gerenciales.
definición de ciencia
La ciencia (del latín scientia 'conocimiento') es el conjunto de conocimientos sistemáticamente estructurados obtenidos mediante la observación de patrones regulares, de razonamientos y de experimentación en ámbitos específicos, de los cuales se generan preguntas, se construyen hipótesis, se deducen principios y se elaboran leyes generales y esquemas metódicamente organizados.1 La ciencia utiliza diferentes métodos y técnicas para la adquisición y organización de conocimientos sobre la estructura de un conjunto de hechos suficientemente objetivos y accesibles a varios observadores, además de basarse en un criterio de verdad y una corrección permanente. La aplicación de esos métodos y conocimientos conduce a la generación de más conocimiento objetivo en forma de predicciones concretas, cuantitativas y comprobables referidas a hechos observables pasados, presentes y futuros. Con frecuencia esas predicciones pueden formularse mediante razonamientos y estructurarse como reglas o leyes generales, que dan cuenta del comportamiento de un sistema y predicen cómo actuará dicho sistema en determinadas circunstancias.
definición de tecnología
 Tecnología es el conjunto de conocimientos técnicos, ordenados científicamente, que permiten diseñar y crear bienes y servicios que facilitan la adaptación al medio ambiente y satisfacer tanto las necesidades esenciales como los deseos de las personas. Es una palabra de origen griego, τεχνολογία, formada por téchnē (τέχνη, arte, técnica u oficio, que puede ser traducido como destreza) y logía (λογία, el estudio de algo). Aunque hay muchas tecnologías muy diferentes entre sí, es frecuente usar el término en singular para referirse a una de ellas o al conjunto de todas. Cuando se lo escribe con mayúscula, Tecnología, puede referirse tanto a la disciplina teórica que estudia los saberes comunes a todas las tecnologías como a educación tecnológica, la disciplina escolar abocada a la familiarización con las tecnologías más importantes. La actividad tecnológica influye en el progreso social y económico, pero su caracter abrumadoramente comercial hace que esté más orientada a satisfacer los deseos de los más prósperos (consumismo) que las necesidades esenciales de los más necesitados, lo que tiende además a hacer un uso no sostenible del medio ambiente. Sin embargo, la tecnología también puede ser usada para proteger el medio ambiente y evitar que las crecientes necesidades provoquen un agotamiento o degradación de los recursos materiales y energéticos del planeta o aumenten las desigualdades sociales. Como hace uso intensivo, directo o indirecto, del medio ambiente (biosfera), es la causa principal del creciente agotamiento y degradación de los recursos naturales del planeta.
Uno de los tópicos en el debate actual sobre la ciencia y la tecnología consiste en determinar que tanto han servido para configurar a las sociedades modernas y trasformar a las tradicionales. Los progresos científicos como también tecnológicos han modificado radicalmente la relación del hombre con la naturaleza y la interacción entre los seres vivos. Hoy en día la ciencia y la tecnología calan los niveles más altos en la sociedad actual. La ciencia y la tecnología no se pueden estudiar fuera del contexto social en el que se manifiestan. Entre la ciencia y la tecnología existe un claro estado de simbiosis; en otras palabras, conviven en beneficio mutuo. Aunque el efecto de ambas actuando conjuntamente es infinitamente superior a la suma de los efectos de cada una actuando por separado. Y, sin embargo, ante estos progresos que no podían ni siquiera imaginar los autopistas del pasado, empiezan a surgir preguntas cada vez más serias sobre el lugar que incumbe la ciencia y la tecnología en nuestra sociedad; y además con una constancia tal que no se pueden ignoras tales problemas. Leí una frase escrita por Albert Camus, la cual me llamó mucho la atención, decía lo siguiente: "El siglo XVII fue de las matemáticas, el siglo XVIII el de las ciencias físicas, el siglo XIX el de la biología y nuestro siglo XX es el siglo del miedo". ¿Es cierto esto?, Podríamos decir que sí; ya que la ciencia y la tecnología han tenido tanto auge, tanto desarrollo que hoy en día muchos temen que la ciencia y la tecnología lleguen a destruir el mundo. Muchas personas lo ven de la siguiente manera, ¿Cuantas personas han muerto en accidentes automovilísticos?, Si la ciencia y la tecnología no los hubiesen creado no hubiesen ocurrido. Pero dejan atrás la otra cara de la moneda, ¿Cuantas personas se han salvado gracias al transporte automovilístico? ¿Cuánto tardaríamos en trasladarnos de un lugar a otro?, Si no se hubiesen desarrollados estos inventos. Lo que une a la ciencia y la tecnología con la sociedad son las necesidades y los deseos de la sociedad. Son muchos los que consideran la ciencia como una amenaza y no solo en nuestros tiempos, sino desde hace muchos años, es el típico caso de Galileo quien fue condenado por el Papa, ya que este consideraba que su nuevo método de considerar la verdad constituía un gran desafío a la autoridad tradicional. Aunque muchos consideran que esto se debe a que la sociedad no tolera aquello sobre lo que no dispone información o simplemente que no lo puede comprender. Hoy en día, la tecnología es parte del sistema de vida de todas las sociedades. La ciencia y la tecnología se están sumando a la voluntad social y política de las sociedades de controlar sus propios destinos, sus medios y el poder de hacerlo. La ciencia y la tecnología están proporcionando a la sociedad una amplia variedad de opciones en cuanto a lo que podría ser el destino de la humanidad.

1.1.1 la tecnología en la sociedad contemporánea

En la antigüedad el hombre se proponía como objetivo principal conocer la naturaleza; en la modernidad dicha intención fue cambiando hacia la voluntad de dominarla y actualmente la tecnociencia siendo un sistema de acciones eficientes cuya base es el conocimiento científico modifica al mundo no abarcando solamente la naturaleza sino a la sociedad y a los seres humanos, transformándolos. Si los seres humanos explotamos la naturaleza y nos volvemos especuladores con la vida ¿qué calidad de vida tendremos?, es más ¿será posible la vida?. Antes el saber científico buscaba la verdad, actualmente a partir de la relación con el capital, la ciencia se integra en la lógica capitalista de maximizar ganancias al menor costo, es decir, la ciencia deviene una fuerza de producción más, un momento en la circulación del capital, como señala Hacking: “Gran parte de la ciencia normal es aplicación tecnológica”. A partir del auge científico y tecnológico en el siglo pasado surgieron reflexiones críticas sobre la ciencia y la tecnología desde diferentes perspectivas: económicas, ecológicas, sociológicas, políticas, etc. Estas reflexiones se preocuparon por las consecuencias ambientales negativas de determinados experimentos científicos; los problemas éticos aparejados por ciertas líneas de investigación tales como la biotecnología, la sociotecnología, la clonación, etc.; la dependencia económica y tecnológica a las que son sometidos los países subdesarrollados así como la función ideológica y de control social que desempeñan algunas teorías. Según Echeverría con estas reflexiones surge otra corriente de pensamiento que podría denominarse “filosofía crítica de la ciencia y la tecnología”. La tecnología se ocupa de la acción humana sobre cosas y personas dando poder sobre cosas y seres humanos, y no todo poder es bueno para todos. La creación de riqueza puede tener efectos negativos. Los riesgos ecológicos, nucleares, químicos y genéticos, muchas veces intangibles y globales, acompañan a los beneficios del desarrollo y afectan a la sociedad moderna Resulta obvio que los avances tecnológicos permiten a la humanidad progresos irrenunciables, pero debemos tener en cuenta los precios a pagar y reflexionar si podemos evitar efectos negativos. La tecnociencia es un instrumento de dominio y transformación de la naturaleza y de la sociedad por eso de ella se espera un avance en el control de la naturaleza, una mejora en la calidad de vida, sin embargo parece beneficiar sólo a determinados grupos sociales. De suerte que es el deseo de enriquecimiento y poder, más que el de saber, el que hoy impone a la ciencia y a la técnica el imperativo de mejorar sus actuaciones y la realización de sus productos. Dejando de lado las razones humanitarias se le da al desarrollo de la ciencia un sentido a favor del incremento del poder económico y político. Hay una preocupación por los sin voz, pero que se verán afectados por los resultados del cambio técnico. Es importante dar cuenta de las decisiones que se adoptan y cómo se adoptan, pero también del "programa oculto" que influye en tales decisiones, y que nunca se hace explícito. Se trataría de desvelar intereses y procesos sociales más profundos que pueden estar en la base de las elecciones sociales de la tecnología. Aceptar acríticamente la tecnología implica un contrato social implícito cuyas condiciones sólo advertimos a menudo mucho después de concretarlo permitiendo que se vayan remodelando las condiciones de vida humanas de modos no deseados y con consecuencias negativas para amplias capas de la población y para el futuro del planeta. Lo que pareciera ser elecciones meramente técnicas son en realidad opciones hacia formas de vida social y política que van construyendo a la sociedad y configurando a las personas, sin plantearse un momento valorativo y reflexivo que introduzca cuestiones sobre las posibilidades de crecimiento de la libertad humana, de la creatividad o de otros valores. No aceptemos vivir encadenados como los prisioneros en la caverna de Platón, rompamos las cadenas pensando críticamente qué sociedad tenemos y qué sociedad queremos. No debemos caer en un “tecnofanatismo” siendo acríticos considerando que el progreso tecnológico traerá progreso económico y por ende social, creyendo que la tecnología es un futuro de promesas que se expandirá a todos los seres humanos; tampoco debemos quedarnos con las visiones “tecnofóbicas”, considerando a la ciencia y a la tecnología como una amenaza para el orden social, donde se le atribuye a la tecnología la causa de todos los males. Ambos son dos caras de la misma moneda donde la tecnología ocupa un lugar central y un rol determinante. Desde la educación se puede contribuir a desmitificar la tecnología contrarrestando alguno de los riesgos que suele traer y para ello hay que conocerla pero no sólo en su aspecto funcional, sino también en el impacto que causa.
Robótica y automatización El campo de la robótica tiene sus orígenes en la ciencia ficción. El término robot proviene del checo y lo usó por primera vez el escritor Karel Capek en 1917 para referirse en sus obras a máquinas con forma de humanoide. Tuvieron que transcurrir otros cuarenta años antes de que se iniciara la moderna tecnología de la robótica industrial. Actualmente los robots son manipuladores mecánicos muy automatizados controlados por computadora. La automatización y la robótica son dos tecnologías estrechamente relacionadas. En un contexto industrial podemos definir la automatización como una tecnología que está relacionada con el empleo de sistemas mecánicos, electrónicos y basados en computadoras en la operación y control de la operación. Ejemplos de estas tecnología son lineas de transferencias, máquina de montaje mecanizado, sistema de control de realimentación (aplicado a los procesos industriales), máquinas herramienta con control numérico, y robots. En consecuencia la robótica es una forma de automatización industrial.Hay tres clases amplias de automatización industrial: automatización fija, automatización programable y automatización flexible. La automatización fija se utiliza cuando el volumen de producción es muy alto y por tanto es adecuada para diseñar equipos especializados para procesar el producto (o un componente de un producto) con alto rendimiento y con elevadas tasas de producción. Un buen ejemplo de la automatización fija es el de embotelladoras de bebida. La economía de la automatización fija es tal que el costo de los equipos especiales puede dividirse en un gran número de unidades y los costos unitarios resultantes son bajos con respecto a los métodos de producción alternativos. El riesgo encontrado con esta automatización es que al ser el costo de inversión inicial elevado si el volumen de produción resulta ser mas bajo que el previsto los costos unitarios serán también más grandes que los considerados en las previsiones. Otro problema con la automatización fija es que el equipo está especialmente diseñado para obtener el producto y una vez que se halla acabado el ciclo de vida del producto es probable que el equipo quede obsoleto. La automatización programable se emplea cuando el volumen de producción es relativamente bajo y hay una diversidad de producción a obtener. En este caso el equipo de producción está diseñado para ser adaptable a variaciones en la configuración del producto. Esta caracteristica de adaptabilidad se realiza haciendo funcionar el equipo bajo el control de un "programa" de instrucciones que se preparó especialmente para el producto dado. El programa se introduce por lectura en el equipo de producción y este último realiza la secuencia particular de operaciones de procesamiento (o montaje) para obtener el producto. En términos de economía el costo del equipo programable puede repartirse entre un grán número de productos aún cuando sean diferentes. Gracias a la característica de programación y a la adaptabilidad resultante del equipo muchos productos diferentes y únicos en su género pueden obtenerse económicamente en pequeños lotes. Como ejemplo de esto mencionaremos el equipo que fabrica utensillos de plástico, el cual con cambios mínimos de matriz y la instalación del software adecuado podemos obtener una infinidad de objetos como ser baldes, vasos, platos, cubiertos descartables, guantes, etc. Existe una tercera categoría entre automatización fija y automatización programable que se denomina automatización flexible o conocido como sistema de fabricación integrado por computadora. El concepto de automatización flexible solo se desarrolló en la práctica en los últimos veinte años. La experiencia adquirida hasta ahora con este tipo de automatización indica que es más adecuado para el rango de producción de volumen medio. Tal como se indica por su posición relativa con los otros dos tipos, los sistemas flexibles tienen alguna de las características de la automatización fija y de la automatización programable. Debe programarse para diferentes configuraciones de producto pero la diversidad de las configuraciones suele estar más limitada que para la automatización programable lo que permite que se produzca un cierto grado de integración en el sistema. Los sistemas automatizados flexibles suelen estar constituidos por una serie de estaciones de trabajo que están interconectadas por un sistema de almacenamiento y manipulación de materiales. Una computadora central se utiliza para controlar las diversas actividades que se producen en el sistema encaminándo las diversas piezas a las distintas etapas de producción y controlando las operaciones programadas en las distintas etapas. De los tres tipos de automatización la robótica coincide más estrechamente con la automatización programable. Un robot industrial es una máquina programable de uso general que tiene unas carácterísticas antropomórficas o humanoides. La característica humnoide más típica de los robots actuales es la de sus brasos móviles. El robot puede programarse para desplazar su brazo através de una secuencia de movimiento con el fin de realizar una tarea de utilidad. Repetirá este modelo de movimiento una y otra vez hasta que se reprograme para ejecutar alguna otra tarea. Por consiguiente la característica de programación permite que los robots se utilicen para una diversidad de operaciones industriales diferentes. muchas de las cuales implican el trabajo del robot junto con otros elementos de equipos automatizados o semi automatizados.

1.1 importancia de la innovación tecnológica en la sociedad contemporanea

Importancia de la innovación tecnológica en BTicino de Venezuela “Durante el último siglo, en el periodo en que podríamos hablar de la parte final de la modernidad, se ha desarrollado un creciente recelo sobre el tipo de realidad que nos proporciona el auge de la actividad científico-tecnológica, de suerte que el público ha comenzado a temer aquello mismo en lo que no puede dejar de confiar”1, que no es otra cosa que el progreso de la ciencia. Por ese motivo, en las última décadas nos encontramos con el auge de programas de estudio y acción encaminados a la discusión abierta, por parte de toda la sociedad, de los fundamentos y consecuencias del desarrollo científico-tecnológico. Así, Ciencia, Tecnología y Sociedad (CTS), en inglés Science and Technology Studies (STS), “corresponde al nombre que se le ha venido dando a una línea de trabajo académico e investigativo, que tiene por objeto cuestionarse sobre la naturaleza social del conocimiento científico-tecnológico y sus incidencias en los diferentes ámbitos económicos, sociales, ambientales y culturales de las sociedades occidentales, principalmente. A los estudios CTS también se les conoce como estudios sociales de la ciencia y la tecnología2.” Este tipo de estudios pretende, entre otras cosas, plantear alternativas a las actuales tendencias en la aplicación y el desarrollo de las tecnologías, partiendo de la base de que “existen relaciones tanto sistémicas como históricas entre tecnología y sociedad”3 y que, a pesar de esa relación, en otros momentos históricos no ha sido la sociedad la que ha tomado decisiones sobre el uso estructural de la ciencia y la tecnología, pues ese poder de decisión estuvo reservado a las instituciones que detentan el poder (gobierno e iglesia, fundamentalmente). Hoy en día queda claro, sin embargo, que “la ciencia, la tecnología y la sociedad son —cada una de diversas maneras— variables dependientes e independientes. En el más amplio sentido, los estudios CTS constituyen un intento por descubrir en estas dependencias e interdependencias un nuevo balance para un mundo posmoderno. Todos aquellos que estén envueltos en el proyecto moderno pueden y deben contribuir a este esfuerzo. En esta tarea, la democracia no es una opción, sino una necesidad. Las consecuencias del desarrollo científico-tecnológico son tan complejas que no pueden predecirse desde arriba. Desde abajo todos debemos estar involucrados en la redefinición del carácter de la relación ciencia-tecnología y sociedad 4.” Y más que un no poder predecir desde arriba, es un no querer hacerlo por conveniencia, porque el desarrollo científico-tecnológico ha traído múltiples beneficios que no se desean perder, mientras que los efectos negativos afectan principalmente a otros, a todos o a un gran número de gente sin que pueda decirse lo mismo de los beneficios. No obstante, para acabar con ello es necesaria la participación responsable del mayor número posible de individuos, basada en el conocimiento y comprensión de la problemática actual y de las alternativas de solución existentes. Debido a la complejidad del desarrollo de la ciencia y la tecnología, por un lado, y las inciertas dinámicas sociales contemporáneas por el otro, hay quienes opinan que los estudios CTS constituyen un engaño, un entretenimiento para aquellos que se preocupan por el impacto que la ciencia y la tecnología puedan tener en el entorno; de tal manera que se pretende hacer creer que alguien se está haciendo cargo del problema. Las transformaciones económicas, sociales y organizativas dadas por el sistema de relaciones que operan a través de los flujos espaciales, como las telecomunicaicones, los sistemas de transporte rápido, etc. están conformando un nuevo modelo de organización social que redefine la estructura de los estados, regiones y territorios a nivel mundial y toca a todos los ámbitos de la organización social, desde la producción hasta el marketing, del tiempo libre a la política, hasta extenderse a nuevas formas de control y vigilancia.1 Sin embargo, la innovación tecnológica no es un "Prometeo Desencadenado" imposible de controlar, aunque tenga contenidos propios que puedan incidir sobre las características de la mutación. La innovación tecnológica no es simplemente el producto de la investigación y desarrollo aplicada a la resolución de problemas sociales y económicos, la manera en la que nace, crece y se difunde depende de un conjunto de factores sociales, económicos y organizativos. Entonces se vuelve importante analizar, como sugería Nathan Rosemberg en un texto de 1982, la caja negra quw comprende los mecnismos constitutivos y de crecimiento de la tecnología para reconsiderar la relación Ciencia-Tecnología-Sociedad, no según una lógica lineal y unidireccional, sino circular y sistemática. 2 Hay que considerar la naturalezaa compleja del proceso innovador y de la relación entre innovación tecnológica y sociedad. La innovación no es sólo la aplicación de los resultados de investigación y desarrollo a alto nivel, sino que también es el resultado de capacidades emprendedoras, estratégicas, de decisión, organizativas e imaginativas. Sugiero por lo tanto, un acercamiento a la innovación tecnológica de carácter sistemático que si bien subraye la fuerte interdependencia entre tecnología, economía, política, cultura y contexto territorrial, supere este modelo sistémico tradicional, en cuanto esté en grado de trasladar la visión teórica a estrategias socio-políticas. Esta definición permite leer la tecnología como organización social y, por lo tanto, no sólo tner una mayor comprensión de las relaciones que se desarrollan entre sociedad y ambiente, sino reconstruir a partir de la sociedad la relación que se establece entre la tecnología y su uso. De esta manera es posible hacer un discurso concreto sobre la innovación tecnológica, individualizando sus potencialidades, evaluando sus límites y describiendo el impacto diversificado sobre el territorio y sobre ele isitema socio económico.
La innovación tecnológica es fundamental para el éxito económico de los países en el futuro, y de acuerdo con un reporte elaborado por Intel y la revista Newsweek, en el que se encuestó a personas de distintos continentes, casi la mitad de los estadounidenses participantes en el estudio comentó que la recesión ha dado lugar a una mayor dependencia de la innovación tecnológica y tres de cada cuatro afirmaron que esta innovación será "más importante" durante los próximos 30 años. Para una gran mayoría de los europeos la innovación tecnológica puede mejorar la calidad de vida y tener un impacto económico positivo. China muestra gran confianza en su fuerza futura, pues un 54% de los chinos predijo que su país será pionero en las próximas innovaciones tecnológicas que influirán en la sociedad, adelantando incluso a Estados Unidos en las siguientes tres décadas. La mayoría de los estadounidenses mira hacia el entorno empresarial y a la creación de empresas como campos en los que se producirá la próxima innovación de punta, mientras que otras personas buscan que el gobierno en ese país ofrezca incentivos para estimular la innovación: un 78% de ellos cree que "una iniciativa de innovación nacional" sería eficaz. En Europa, más de un 75% de los alemanes y los británicos consultados apoya una iniciativa nacional similar en sus países y, en contraste con los estadounidenses, los europeos y los chinos se inclinan más a buscar las futuras fuentes de la innovación en las universidades. La encuesta fue realizada en línea entre el 28 de septiembre y 13 de octubre en China, Alemania, Reino Unido y Estados Unidos por Penn, Schoen & Berland Associates a nombre de la revista Newsweek e Intel; el universo de participantes fue de 4,800 adultos mayores de 18 años en cuatro países; las entrevistas se realizaron entre miembros de la población general y ejecutivos de negocios.
La innovación tecnológica constituye una estrategia clave dirigida al desarrollo de nuevos procesos y productos, mediante la generación, transferencia, incorporación y adaptación de tecnologías; representa un trabajo sistemático que implica ver el cambio como una oportunidad, superar lo gastado, lo obsoleto, lo improductivo, llevar ideas nuevas al nivel de realización práctica, hasta que sean utilizables y aplicables. La innovación es producto de la creatividad del hombre y la mujer, y el empleo eficaz de las herramientas de Ciencia y Tecnología. Impulsar la innovación en los sectores productivos de bienes y servicios y regiones, requiere de una organización y gestión de sus sistemas de innovación. El gráfico pretende ilustrar la manera como la ciencia y tecnología puede hacer viable una estructura productiva fuerte y duradera, capaz de contribuir al desarrollo integral del país. Claramente se denota que existen ámbitos verticales (columnas del desarrollo), que están formados por los diversos sectores productivos de bienes y servicios, y ámbitos horizontales (transectoriales productivos), que reflejan la necesidad de superar grandes carencias regionales y nacionales en la gestión de la tecnología y la innovación (escalones del desarrollo), y en las vigas superiores que completan la contribución productiva para el desarrollo integral del país, donde se tiene aquellos espacios productivos que cruzan varios o todos los sectores, y que tienen insuficiente desarrollo y que por lo tanto, requieren de una especial atención.

lunes, 19 de marzo de 2012

1.3.3 La Sociedad De la Información



Sociedad de La Información/ Sociedad del Conocimiento

¿Vivimos en una época de cambios o un cambio de época? ¿Cómo caracterizar a las profundas transformaciones que vienen con la acelerada introducción en la sociedad de la inteligencia artificial y de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC)? ¿Se trata de una nueva etapa de la sociedad industrial o estamos entrando en una nueva era? “Aldea global”, “era tecnotrónica”, “sociedad postindustrial”, “era -o sociedad- de la información” y “sociedad del conocimiento” son algunos de los términos que se han acuñado en el intento por identificar y entender el alcance de estos cambios. Pero mientras el debate prosigue en el ámbito teórico, la realidad corre por delante y los medios de comunicación eligen los nombres que hemos de usar.
Cualquier término que usemos, en el fondo, es un atajo que nos permite hacer referencia a un fenómeno -actual o futuro-, sin tener que describirlo cada vez; pero el término escogido no define, de por sí, un contenido. El contenido emerge de los usos en un contexto social dado, que a su vez influyen en las percepciones y expectativas ya que cada término lleva consigo un pasado y un sentido (o sentidos), con su respectivo bagaje ideológico. Era de esperarse, entonces, que cualquier término que se quiera emplear para designar la sociedad en la que vivimos, o a la cual aspiramos, sea objeto de una disputa de sentidos, tras la que se enfrentan diferentes proyectos de sociedad.
En el marco de la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información -CMSI-, hay dos términos que han ¬ocupado el escenario: sociedad de la información y sociedad del conocimiento, con sus respectivas variantes. Pero, si bien el marco impuso el uso del primero, desde un inicio provocó disconformidad y ningún término ha logrado un consenso.
Historia de los términos
Sociedad de la información
En la última década, la expresión “sociedad de la información” se ha consagrado sin lugar a dudas como el término hegemónico, no necesariamente porque exprese una claridad teórica, sino por el bautizo que recibió en las políticas oficiales de los países más desarrollados, además de la coronación que significó honrarlo con una Cumbre Mundial.



Los antecedentes del término, sin embargo, datan de décadas anteriores. En 1973, el sociólogo estadounidense Daniel Bell introdujo la noción de la “sociedad de la información” en su libro El advenimiento de la sociedad post-industrial[1], donde formula que el eje principal de ésta será el conocimiento teórico y advierte que los servicios basados en el conocimiento habrán de convertirse en la estructura central de la nueva economía y de una sociedad apuntalada en la información, donde las ideologías resultarán sobrando.
Esta expresión reaparece con fuerza en los años 90, en el contexto del desarrollo de Internet y de las TIC. A partir de 1995, fue incluida en la agenda de las reuniones del G7 (luego G8, donde se juntan los jefes de Estado o gobierno de las naciones más poderosas del planeta). Se ha abordado en foros de la Comunidad Europea y de la OCDE (los treinta países más desarrollados del mundo) y ha sido adoptada por el gobierno de los Estados Unidos, así como por varias agencias de las Naciones Unidas y por el Grupo Banco Mundial. Todo ello con gran eco mediático. A partir de 1998, fue elegida, primero en la Unión Internacional de Telecomunicaciones y luego en la ONU, como el nombre de la Cumbre Mundial a realizarse en 2003 y 2005.
En este contexto, el concepto de “sociedad de la información”, como construcción política e ideológica, se ha desarrollado de la mano de la globalización neoliberal, cuya principal meta ha sido acelerar la instauración de un mercado mundial abierto y “autoregulado”. Esta política ha contado con la estrecha colaboración de organismos multilaterales como la Organización Mundial del Comercio (OMC), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, para que los países débiles abandonen las regulaciones nacionales o medidas proteccionistas que “desalentarían” la inversión; todo ello con el conocido resultado de la escandalosa profundización de las brechas entre ricos y pobres en el mundo.

En efecto, para fines de siglo, cuando la mayoría de los países desarrollados ya habían adoptado políticas de desarrollo de la infraestructura de las TIC, se produce el auge espectacular del mercado de acciones de la industria de la comunicación. Pero los mercados del Norte comienzan a saturarse. Entonces, se intensifican las presiones hacia los países en desarrollo para que dejen la vía libre a la inversión de las empresas de telecomunicaciones e informática, en busca de nuevos mercados para absorber sus excedentes de ganancias. Es en este contexto que se convoca la CMSI; panorama que se modifica, sin embargo, una vez que estalla la burbuja bursátil a partir del año 2000. No obstante esta realidad y el rol clave que las tecnologías de la comunicación han desempeñado en la aceleración de la globalización económica, su imagen pública está más asociada a los aspectos más “amigables” de la globalización, como Internet, telefonía celular e internacional, TV por satélite, etc. Así, la sociedad de la información ha asumido la función de “embajadora de buena voluntad” de la globalización, cuyos “beneficios” podrían estar al alcance de todos/as, si solamente se pudiera estrechar la “brecha digital”.



Sociedad del conocimiento
La noción de “sociedad del conocimiento” (knowledge society) surgió hacia finales de los años 90 y es empleada particularmente en medios académicos, como alternativa de algunos a “sociedad de la información”.
La UNESCO, en particular, ha adoptado el término “sociedad del conocimiento”, o su variante “sociedades del saber”, dentro de sus políticas institucionales. Ha desarrollado una reflexión en torno al tema, que busca incorporar una concepción más integral, no en relación únicamente con la dimensión económica. Por ejemplo, Abdul Waheed Khan (subdirector general de la UNESCO para la Comunicación y la Información), escribe[3]: “La sociedad de la Información es la piedra angular de las sociedades del conocimiento. El concepto de “sociedad de la información”, a mi parecer, está relacionado con la idea de la “innovación tecnológica”, mientras que el concepto de “sociedades del conocimiento” incluye una dimensión de transformación social, cultural, económica, política e institucional, así como una perspectiva más pluralista y desarrolladora. El concepto de “sociedades del conocimiento” es preferible al de la “sociedad de la información” ya que expresa mejor la complejidad y el dinamismo de los cambios que se están dando. (...) el conocimiento en cuestión no sólo es importante para el crecimiento económico sino también para empoderar y desarrollar todos los sectores de la sociedad”.

Un matiz en este debate, que solo concierne a los idiomas latinos, es la distinción entre sociedad del “conocimiento” o del “saber” (ambos traducen el término inglés “knowledge society”). La noción de “saberes” implica certezas más precisas o prácticas, mientras que conocimiento abarca una comprensión más global o analítica. André Gorz considera que los conocimientos se refieren a “contenidos formalizados, objetivados, que no pueden, por definición, pertenecer a las personas... El saber está hecho de experiencias y de prácticas que se volvieron evidencias intuitivas y costumbres”[4]. Para Gorz, la “inteligencia” cubre toda la gama de capacidades que permite combinar saberes con conocimientos. Sugiere, entonces, que “knowledge society” se traduzca por “sociedad de la inteligencia”.
En todo caso, por lo general, en este contexto se utiliza indistintamente sociedad del conocimiento o del saber, si bien en español conocimiento parece ser más usual.



1.3.1 Descubrimientos Nacionales E Internacionales


Avances tecnológicos abarataran smartphones

México,- El avance tecnológico, así como la lucha comercial entre los diferentes fabricantes de smartphones provocarán una reducción en el costo de los equipos, lo que permitirá a un mayor número de personas tener accesos a ellos.
Así lo señaló el especialista, Daniel Becerril, quien aseguró que “en el futuro tener un teléfono con la actual tecnología, que aún es muy cara, va ser algo mucho más fácil y común, ya que se volverá una herramienta indispensable. El tiempo y los avances permitirán un abaratamiento de los equipos”, agregó.
Expresó que la amplía competencia entre las diferentes empresas desarrolladoras de sistemas operativos y teléfonos contribuirán a la reducción de los precios, toda vez que tratarán de obtener una mayor participación del mercado.
El también académico de la Universidad de Londres argumentó que la competencia estará más enfocada al software, principalmente entre Iphone, con el sistema iOS, y Google con el Android, el cual ha crecido en los últimos años.
En tanto que Black Berry se quedará con una parte reducida del mercado y Symbiam (un sistema operativo que fue producto de la alianza de varias empresas de telefonía móvil) irá desapareciendo.
Explicó que el sistema operativo de Nokia está en decadencia, “se aisló y se quedó; Android lo igualó y supero rápidamente, bastante bien. Por lo que debe comenzar a pensar una estrategia de alianza por que no creo que sea el futuro su sistema”.
Ante este panorama, Becerril López comentó que debido a cuestiones como funcionalidad y diseño, en los últimos años el Iphone ha dominado el mercado, provocando que las demás marcas traten de igualar los servicios y se dirijan hacia una estandarización.
“Yo creo que más que marca de teléfono, la competencia estará más enfocada al sistema operativo, la competencia más fuerte esta entre Mac y Google”, afirmó.
El experto en tecnología agregó que la competencia también provocará un continúo conflicto de licencia y patentes, pues la estandarización causará que los elementos populares sean copiados por los demás fabricantes.

1.2.3 El Papel De Las Organizaciones Científicas Tecnológicas


Organización y productividad científica y tecnológica de algunos países de América Latina


Modesto Montoya
Centro de Preparación para la Ciencia y Tecnología
www.ceprecyt.org

Con vista a la reforma del Estado, echemos una mirada a la forma en la que los Estados de América Latina se han estructurado para promover la ciencia y la tecnología (CyT), cruciales para el desarrollo de los países.





En México, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) cuenta con el Sistema Nacional de Investigadores (SIN), conformados por científicos que reciben incentivos económicos según el nivel asignado. Se tiene también el Programa de Apoyo Complementario para la Consolidación Institucional, el que propicia la incorporación de investigadores con grados de doctor residentes en México a instituciones de investigación mexicanas.

Argentina tiene un Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología, con una Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva (SeTCIP), a la que está adscrito el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), principal órgano promotor de la ciencia y tecnología en Argentina. El CONICET cuenta con la Carrera del Investigador Científico y Tecnológico (CICT), para incentivar dedicación de los investigadores científicos y tecnológicos que trabajan en las instituciones científicas y tecnológicas argentinas. Desde hace 5 años, el CONICET tiene en promedio 3500 investigadores, distribuidos en cinco categorías, según su desempeño. El 70% de ellos trabajan en las universidades nacionales, y el 30% en unidades ejecutoras propias o en organismos descentralizados de ciencia y tecnología.

Brasil también tiene un Ministerio de Ciencia y Tecnología (MCT), responsable de la formulación e implantación de la Política Nacional de Ciencia y Tecnología. El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CCT), órgano colegiado del MCT, es presidido por el Presidente de la República, y el Secretario es el Ministro de Ciencia y Tecnología. Entre las misiones de CCT está la de sugerir ideas sobre el área, estudiar y evaluar la ejecución de la política del Sector, y opinar sobre propuestas o programas que puedan causar impacto en la política nacional de desarrollo. Los mayores centros de investigación de Brasil están adscritos al MCT.





Costa Rica hizo noticia cuando, luego de la evaluación de varios países de América Latina, INTEL decidió establecer una planta de microchips en su territorio. Costa Rica cuenta con el Ministerio de Ciencia y Tecnología (MICIT), el que promueve, incentiva y estimula la creación de condiciones apropiadas para que la investigación, la innovación, el conocimiento y el desarrollo tecnológico del país, apoyen el crecimiento económico y a una mejor calidad de vida en los costarricenses. Se tiene el régimen de promoción del investigador, el que consiste en un escalafón de méritos y desempeño, para impulsar la formación y la integración en el país de un equipo altamente calificado de investigadores, dedicados a la realización de actividades y proyectos en ciencia y tecnología.

En el Perú, por múltiples razones, pero sobre todo para optimizar el uso de recursos destinados a ciencia y tecnología, conviene un Ministerio de Ciencia y Tecnología, que proponga y lleve a cabo una política científica y tecnológica; y un Grupo Ocupacional Científico y Tecnológico, para atraer a científicos e ingenieros altamente calificados residentes en el Perú y en extranjero, y participar en la solución de los problemas nacionales, en especial de los sectores productivos.




1.3.2 DESCUBRIMIENTOS INTERNACIONALES

1. Google: La fundaron en 1998, pero sin lugar a dudas los últimos diez años han sido “la década de Google”. Ya en julio de 2000, el buscador ocupaba el primer lugar. Google se ha convertido en mucho más que un buscador, y se está posicionando en la mayoría de los sectores de la industria tecnológica (Android, Chrome), como ya lo hemos comentado en otras ocasiones, mientras Google nos siga regalando sus múltiples servicios, nadie lo podrá desbancar. ¡Mis respetos para los logros de Google!


2. Telefonía celular: Esta tecnología tiene ya alrededor de 20 años de existir, pero fue en esta última década cuando se generalizó exponencialmente. De ser un artículo de lujo, se ha convertido en una necesidad (hasta para los niños). En 2004 había 34 millones de teléfonos celulares en México, en 2008 aumentaron a 76 millones, y se prevé que para el 2012 habrá 97 millones de celulares en el país.



3. Internet de banda ancha: ahora es tan natural como tener electricidad en un gran número de hogares. Antes de esta tecnología todos recordamos los dichosos módems de 56k con su inolvidable ruidito al conectarse. Los de banda ancha empezaron con conexiones de 128 Kb. En México Telmex nos ofrece hasta 5 Mb velocidad y en otros países como en Japón nos llevan mucha delantera con conexiones promedio de 200Mb y de hasta ¡1 Gb!.
4. Wi-Fi:
 En 2000 que comenzó, esta tecnología tenía precios prohibitivos. Ahora todo tipo de dispositivos, desde televisiones a teléfonos celulares, cuentan con este soporte y otras tecnologías como el bluetoothDefinitivamente, la década pasada marcó el principio del fin de los cables.
5. iPod: Los primeros reproductores MP3 con disco duro fueron lanzados en el 2000. Sin embargo,Apple pronto dominaría el mercado, empezando en el 2001 con el primer reproductor que combinaría un diseño atractivo con facilidad de uso y buena capacidad. Rápidamente, el iPod se convirtió en un término conocido por todos (como los kleenex), marcando el inicio de la era de gloria para elMP3. Además de ofrecer también su super biblioteca musical en la iTunes Store . Apple es el líder y así seguirá por los siglos de los siglos.



6. iPhone: pantalla táctil, fácil de usar y la super App StoreApple se lució con el lanzamiento del iPhone hace tres años. El aparato en sí cambió la comunicación móvil y se convirtió en un ejemplo a seguir por todos los fabricantes. iPhone está en su tercera generación y desde que vio la luz, la competencia ha tenido dificultades para superarlo.
7. Redes Sociales (FacebookMySpaceTwitter): 
Cada vez es más el tiempo que los internautaspasamos en las comunidades y medios sociales. El rey es, sin duda, Facebook y para muchos resulta adictivo.
8. Pantallas planas: La tecnología más esperada: las pantallas planas de TV. Actualmente la tecnología predominante es LCD. Pero ya hay alternativas de mayor calidad como las pantallas LEDOLED. Odio que cuando empieza a abaratarse cierta tecnología es porque ya hay otras mucho mejores –a precios inalcanzables-.
9: Vídeo de Alta Definición: Aparecieron las televisiones planas, pero la tecnología DVD ya no era suficiente. Llegaron el HD-DVD y Blu-ray, peleando el territorio. Finalmente, la victoria fue paraBlu-ray, gracias a las ventas de la consola PS3 y al apoyo de la industria del cine. Ahora queremos ver todo en HD -bueno, a excepción de los programas de TV Azteca y Televisa, donde solo sirve para verles maximizadas las arrugas y espinillas a los actores y conductores-.
10. Navegación GPS para cualquier mortal:
En el 2000 pusieron a nuestra disposición los satélites militares estadounidenses de posicionamiento global: GPS, ¡gratis!. Google se lució en este sentido con su Street View.
Definitivamente, en la pasada década hubo avances tecnológicos que marcaron la diferencia. ¿Se dan cuenta que cada vez es más difícil estar al corriente en este sentido? Todos los días hay novedades, aparatos más avanzados, aplicaciones nuevas, juegos, softwaresgadgets, etc. A menos que seas un technofreak, es imposible estar al día.